Épico, emocionante, histórico y fabuloso lo que lograron los
Gunners para conseguir avanzar a los cuartos de final de la Capital One Cup.
Fue asombroso, cómo, un equipo que arrancó perdiendo a 4-0
antes del cierre del primer tiempo haya conseguido tamaño resultado, con un
alargue de por medio, muchos jugadores de la visita demostraron un amor propio
tremendo y terminaron alcanzando un hito imborrable.A los 20’ iniciales, el Reading ya estaba con tres goleas a favor, mediante un tanto de cabeza de Roberts, un autogol gol de Koscielny y un error del joven arquero Martínez tras un remate desde afuera del área.
Sin reacción, Hunt marcó el 4 a 0. Walcott sobre el final de la primera etapa logró el descuento.
En el complemento, la actitud del equipo cambió. Un tiro en el palo de Wallcott y otro desviado de Gnabry nos ilusionaba con el segundo, que finalmente llegó mediante Giroud a los 64’. Arshavin estaba intratable y era el conductor del equipo.
Federici evitó en dos oportunidades en gran forma otro gol de Giorud. Al minuto 89, Koscielny tras un córner convirtió el 4-3. Las esperanzas estaban más vivas que nunca.
El árbitro adiciono cuatro vidas más, y en el último instante, Walcott nos dio la igualdad.
Tiempo extra debía jugarse. Arshavin tuvo en sus pies el 4-5, que en definitiva fue marcado por Chamack luego de una jugada exquisita en lo colectivo todavía en el primer tiempo extra.
Iniciado la segunda mitad, Walcott se perdió el sexto.Sin embargo Pogrebnyak de cabeza a los 115’ puso el cinco a cinco, reviviendo al público local.
Sobre el final, Arsahvin se escapó por la izquierda, remató al arco, un desvió y apareció Walcott de arremetida para poner en ventaja al Arsenal.
El árbitro dejó seguir el partido por tres minutos más, tiempo que aprovechó Chamack para con una lujosa definición sellar el resultado.
Éste partido, por su idas y vueltas, la desazón de comerse una goleada, la actitud de los jugadores, el drama hasta el último minuto y la brillantez en momentos de tensión, quedará en mi memoria hasta el fin de mis días por nunca haber bajado los brazos..
Otro regalo más que me da el Arsenal , orgulloso desde el primer día de estos colores.
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