Victoria casi decisiva alcanzó el Millonario de cara al
encuentro de vuelta en un partido atípico, que comenzó en la noche del jueves y
por un bochornoso problema de iluminación finalizó en los primeros minutos del
viernes.
Para empezar, las altas temperaturas con que se desarrollo
el juego en Asunción, 37 grados al inicio, hacían vislumbrar una jornada
complicada. El conjunto de Gallardo a pesar de eso se mostró mejor que el
local, aunque su nivel no fue superfluo.
Un tiro libre de Carlos Sánchez que pasó pegado al palo fue
la aproximación más clara de la vista. Sin embargo, cuando se disputaba el primer
minuto agregado del primer tiempo, un zapatazo de Vargas desde afuera del área
superó a la floja resistencia de Barovero y puso en ventaja al equipo paraguayo.
A los 55’, ya en el complemento, Pezzela con la mano cometió
un claro penal, pero antes de la ejecución, sucedió el primer corte de luz.
Largo de tiempo hasta la reanudación.
Rodrigo López debía volver a comenzar el partido nada menos
que pateando un penal, vaya cosa extraña. Sin embargo, el uruguayo ejecutó mal
la falta y falló.
Vida para River, que a los 61’ llegó a la igualdad luego de
un desborde de Funes Mori y un anticipo goleador
de Carlos Sánchez. Tras esa conquista, volvió a cortarse la luz, y otra vez se perdieron
más de diez minutos en la espera.
La reanudación del cotejo lo encontró al conjunto argentino
siendo protagonista, Mora habilitó a Driussi al minuto 71, y el juvenil definió
con categoría ante la salida del arquero para convertir su primer gol con la
Banda.
Pudo haberlo empatado Libertad con un disparo de Camacho que
no se fue lejos del palo custodiado por Barovero. Sin embargo Simeone, el hijo
mayor del Cholo, selló el resultado luego de un pase de Pisculichi en un contra ataque.
Por todas inconvenientes que le tocó superar, River
disfrutará mucho este triunfo, aunque falta revalidar lo conseguido en la
vuelta la semana próxima.
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